Alopecia Areata
La alopecia areata es un tipo de alopecia que se desarrolla con mayor frecuencia en niños y en adultos jóvenes (30-40 años), aunque se puede presentar a cualquier edad y sin predominio de género.
El 90% de los casos afecta al cuero cabelludo, aunque puede aparecer en otras zonas y está asociada a otras enfermedades autoinmunes en un 30% de los casos
¿Qué provoca la Alopecia Areata?
La causa es Autoinmune, aunque participan otros factores como la genética (asociado en un 10-20%), estres, problemas psiquiátricos y ciertos factores ambientales que actuarían como desencadenantes ( dieta, factores hormonales, infecciosos, vacunas, etc).
Desde el punto de vista inmune, la alopecia areata se ve afectada por una pérdida del privilegio inmunitario folicular. en condiciones normales el folículo no es atacado por el sistema inmune debido a diferentes mecanismos moleculares. en la alopecia areata el folículo pierde estos mecanismos de protección propiciando de esta manera una respuesta inmunitaria liderada por células de la serie blanca (linfocitos T CD4, CD8 y células natural killer), provocando una reacción inflamatoria local dañando el desarrollo y crecimiento del pelo en dicha zona, respetando región de células madre de la protuberancia (esto explica por que en la alopecia areata es reversible).
Manifestación clínica
Se manifiesta clínicamente mediante la rápida aparición de una o más placas de alopecia de borde bien delimitado y con pilotracción positiva (con una pequeña tracción se puede arrancar una cantidad considerable de cabellos).
Se puede presentar como placa unica (mejor pronóstico), en placas abundantes o multifocal no confluentes o confluentes que pueden dar lugar a una alopecia areata universal/total.
¿Cómo se diagnostica?
Es fundamentalmente clínico y a través de los hallazgos observados mediante tricoscopia, aunque puntualmente puede ser necesaria la realización de una biopsia cutánea para confirmar el diagnóstico.
Para valorar la severidad de la alopecia se recomienda aplicar la escala de SALT, que evalúa la superficie del cuero cabelludo afectado.
Debido a la alta asociación con enfermedades autoinmunes el especialista podría solicitar una analitica para descartar causas orgánicas.
Tratamiento
Las pautas terapéuticas se establecen en función de la edad del paciente, la extensión y el tiempo de evolución de la enfermedad.
Actualmente no existe ningún tratamiento que altere el curso natural de la enfermedad, aunque disponemos de terapias que pueden inducir la repoblación capilar en muchos pacientes.
Las formas aisladas y en pocas placas, especialmente en niños se suelen recuperar de forma espontánea. En adultos o en cuadros más extensos y graves podría ser necesario el uso de corticoides tópicos o inyectados, incluso inmunosupresores, siempre debe ser individualizado y pauteados por un médico especialista.